Compartir:

El liderazgo es la capacidad que todos tenemos de expresar una visión y lograr que con motivación otros la vivan concretamente. En este camino, es muy recurrente que el líder ignore la humildad, cualidad fundamental que lo caracteriza.

Por lo general las personas no logran descubrir y pulir con facilidad el líder que llevan dentro, pues consideran que el liderazgo es solo para los exitosos, los que tienen ideas brillantes, los que caen bien a todos, los que ocupan un alto cargo en una empresa, además de tener un gran número de seguidores en las redes sociales.

Todos somos líderes y en diferentes aspectos: religiosos, juveniles, políticos, sociales, estudiantiles etc. No debe importarnos las características superficiales, sino tener presente que el verdadero liderazgo es aquel que se ejerce con humildad, con el ejemplo.

En este sentido el liderazgo no se da solamente en los macro proyectos o cuando tienes un gran número de personas a cargo, sino también en lo micro, en lo cotidiano.

La clave, la regla de oro del liderar con humildad está en aprender escuchar a la otras personas, no para esperar a que termine de hablar para luego imponer la opinión personal, sino para conocer y construir una idea, propuestas y soluciones que nos ayuden a todos a alcanzar nuestros objetivos.

Comparto 7 tips para aplicar en el trabajo, la universidad, el hogar y en la vida diaria que nos ayudarán a ser líderes humildes:

 

1- No abuses de tu poder como líder: Es imposible que exista la humildad en los líderes que se aprovechan de sus roles o cargos superiores para colocarse despóticamente sobre otros. Para ello es importante eliminar todo tipo de barrera que dificulte la cercanía de otros hacia ti.

 

2- Oler como tu rebaño: Ésta es una de las expresiones del Papa Francisco más citada en este tipo de temas, pues propone que los líderes que están a la cabeza, se sumerjan en la organización que tienen a su cargo mediante integraciones, espacios de diálogo dentro y fuera del trabajo.

 

3- No juzgar: Siempre es bueno escuchar ideas de tu equipo para mejorar las cosas. El objetivo es evaluar consultando a otros y sin criticar. Recuerda que en el proceso de pedir sugerencias hay que callar para prestar atención. En una de sus homilías el Papa Francisco dijo: “escuchar es abrir el corazón, y eso es lo que hace posible la proximidad sin la cual el encuentro espiritual genuino no puede producirse.” ¡No olvides la regla de oro!

 

4- ¡Sé inclusivo!: Incluye a los demás en la toma de decisiones, no solamente los que opinen igual a ti sino personas que puedan aportar nuevas ideas y que no teman decirte la verdad. La meta es simple: no dejes a nadie afuera.

 

5- Evita vivir como una isla: ¡Mucho cuidado con la soberbia! El líder debe ser consciente que siempre ha de necesitar de la ayuda de los demás. Por eso el diálogo es fundamental para derribar muros y estar en mayor contacto con las personas.

 

6- Por sobre todo el pragmatismo: Los pragmáticos ven el mundo tal cual como es, nunca como quisieran que fuera. No basta con soñar que todo es perfecto, hay que comprometerse e involucrarse activamente por lo que queremos alcanzar.

 

7- Vive en la frontera: Esta es otra frase icónica del Papa francisco que enfatiza su humildad y autoridad. Se refiere aquellas personas que viven en las periferias y que toman sus decisiones basadas en la experiencia. Todos podemos vivir en la frontera desde lo cotidiano, para ello hay olvidarse de uno mismo, salir de nuestra zona de confort, vivir los problemas de esa gente y comprenderlos.

 

Espero que estos 7 tips los ayuden a ver el líder que llevan en tu interior. No se necesita hacer labores heroicas para ser un líder, sino actuar con humildad en las actividades del día a día, desde tu frontera.

 

Por Rafael Silva

 

 

Compartir: