Compartir:

El uso excesivo o adicción a los dispositivos electrónicos no solo afectan a los menores, también causan daños en los adultos.

De lo que nos perdemos… En la actualidad se habla mucho del daño que ocasionan el celular y los dispositivos electrónicos en los niños; sin embargo, poco se comenta del perjuicio y potencial adicción que su uso excesivo causa en los adultos. Y mucho menos se hace referencia del efecto nocivo de su utilización por los padres en el tiempo en que están con los hijos. Compartir con nuestros hijos con un celular en la mano tiene implicaciones directas en la relación afectiva.

Quizás el más evidente de todos sea el “ejemplo” que se da al niño que observa a sus padres todo el día “enganchados” a un dispositivo. Éste poco entenderá de que sea perjudicial o de que no deba usarlo, así se lo repitamos varias veces al día o establezcamos reglas para limitarles su uso.

 

 

Afectación en el desarrollo lingüístico y socioemocinal de los hijos

Un reciente estudio liderado por investigadores de la Universidad de Tel Aviv, en Israel, evaluó el impacto del uso materno/paterno de teléfonos inteligentes en la interacción madre-hijo. Lo que buscaba esta investigación era recrear momentos de la vida cotidiana en la que los padres cuidan a sus hijos y atienden o no a sus celulares. El estudio demostró que la interacción madre hijo disminuía sustancialmente; las repuestas y verbalizaciónes de la madre eran escasas, así como las miradas y la adecuada expressión del lenguaje no verbal.

En cuanto a la conducta, se concluyó que niños desde los 9 meses hasta los 6 años, mostraron mayores niveles de “comportamiento protesta”, así como reflejaban en su rostro el efecto “cara inmóvil” que les mostraban sus padres absortos en el dispositivo.

 

 

Habilidades por imitación

Las habilidades de comunicación son fundamentales para el desarrollo de los hijos. Los niños pequeños adquieren habilidades sociales y de comunicación escuchando, hablando, cantando y jugando. Estas valiosas interacciones se pueden perder mientras se está distraído con un teléfono inteligente.

 

 

Sugerencias para los padres

Para los padres que están comprometidos con un sano desarrollo psicoafectivo de sus hijos, podríamos sugerir; por ejemplo, tener horarios sin tecnología. Establezca tiempos y escoja aquellos en estará con sus hijos, para determinar que no se hará uso de ningún dispositivo. Al inicio será difícil, luego resultará más fácil. Lo importante es cumplirlo.

Introduzca zonas libres de tecnología en su casa ; espacios en donde no se deberá ingresar con ningún aparato. Trate de escoger aquellos en que se pasa mayormente tiempo con la familia. Comedor, sala familiar o dormitorios.

Busque tener salidas o paseos sin tecnología durante la semana, en las que el uso de los smartphones esté prohibido. Llévelo sólo para las emergencias o limítelo para las comunicaciones indispensables.

Cuando estemos con nuestros hijos hagámoslo de cuerpo y mente. Muchas veces ni siquiera tenemos contacto visual con ellos y nos perdemos de las miradas, reacciones y el lenguaje no verbal implícito en toda actividad lúdica; desperdiciando las posibilidades de enseñanza que estos momentos conllevan.

Lo más importante para los padres deben ser sus hijos. La cotidianidad nos regala mil posibilidades de transmitir valores, demostrar cariño, crear recuerdos, construir anécdotas, inventar juegos; no permitamos que se nos pase la vida por dedicar tiempo a un aparato, Quizá, luego de muchos años, una vieja foto del niño que ya no es, nos recuerde de “lo que nos perdimos”.

 

 

Escrito por: Karina Oneto de Nugué, Orientadora Familiar.

 

Compartir: