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Quiero compartirles mi opinión respecto a la Ley de aborto por violación, y lo que es para mí la chispa de vida que tiene un feto de veinte semanas!

La Comisión de Justicia y Estructura del Estado de la Asamblea Nacional, aprobó el informe para segundo debate de la Ley Orgánica que Garantiza la Interrupción Voluntaria del Embarazo en casos de Violación, con siete votos a favor, dos en contra y una abstención.

Cabe resaltar que el Proyecto de la mayoría de la Comisión, no ofrece más alternativas que el aborto. Se lo presenta como la única y principal solución, discriminando a un ser humano por su origen: por ser fruto de una violación.

Este proyecto de Ley presenta varios nudos críticos. Me gustaría abordar el tema de la temporalidad, que se aborda en el artículo 19. Se habla de “plazos” para acceder a un aborto en las víctimas de una violación:

1. Menores de 18 años, hasta las 22 semanas de gestación.
2. De 18 años en adelante, hasta las 20 semanas de gestación.
3. Personas con discapacidad mental [hasta los 9 meses]

Un embriólogo dirá que, desde las primeras etapas de su desarrollo, desde el momento de la fecundación estamos ante un nuevo ser humano, único e irrepetible. El ser humano debe ser respetado y tratado como persona desde el momento de su concepción. Existe un derecho intrínseco a la vida. El derecho a vivir jamás puede ser suprimido, ni vulnerado por una ley. Es un derecho de “todo ser humano”, sin excepciones de ninguna clase.

En este artículo me detendré a comentar sobre el desarrollo humano en la semana 20 de gestación. Responderé la pregunta: ¿cómo es y cómo está un bebé en el vientre materno en esta etapa de desarrollo?

 

 

Semana 20: el ecuador de la gestación

La semana 20 es clave, empieza el quinto mes, la segunda mitad del embarazo. Revisemos algunas características del desarrollo humano en esta etapa:

“El feto pesa de 340 a 450 gramos y mide alrededor de 30 centímetros, comienza a dar signos de personalidad individual. Tiene ritmos definidos de vigilia y sueño, adopta su posición favorita en el útero (su postura) y es más activo: patea, se estira, se retuerce y tiene hipo. Si se pone la oreja contra el abdomen de la madre, puede oírse el corazón del feto. Las glándulas sudoríparas y sebáceas funcionan. […] Comienzan a crecer vellos ásperos como cejas y pestañas, vello fino en la cabeza, a la vez que una pelusa llamada lanugo que cubre el cuerpo” (Papalia y Feldman).

En la semana 20 ya se podrían llegar a sentir los movimientos del bebé. Sus pulmones comienzan a practicar la respiración, su cerebro se desarrolla a pasos acelerados, sus órganos ya están formados, pero aún son inmaduros. Su piel se está haciendo más gruesa y empieza a tener capas. En una ecografía se pueden distinguir sus miembros, su cabeza, su cuerpo con claridad. E incluso, ya podría distinguirse si es varón o mujer.

Algo importante de aportar es que según la ciencia el feto posee receptores del dolor desde la octava semana de gestación, y conforme va avanzando el embarazo podrá experimentar un dolor más intenso. Esto quiere decir que ellos sí serán sensibles al dolor en la práctica de un aborto, lo cual representa una verdadera tortura para estos seres humanos indefensos. ¡Nunca podrá ser ético ser indiferente ante el dolor del niño en el vientre materno!

 

 

Un hecho de vida

“Estaba operando a una embarazada de veinte semanas y la niña [en el vientre] tuvo fuerza suficiente como para darme una patadita en la mano”, cuenta el ginecólogo Carlos Larrañaga. Leamos, a continuación, su testimonio completo:

Durante el embarazo, las mujeres gestantes pueden padecer una complicación que se denomina “incompetencia cervical”. Consiste en que el cuello del útero se dilata sin contracciones. Es un fenómeno que se suele producir cuando aún faltan muchas semanas para el parto.

El cerclaje de urgencia es una técnica que en su momento fue calificada de “heroica” por algunos profesionales de la ginecología. Nuestro grupo aprendió el procedimiento y hemos realizado ya bastantes cerclajes de urgencia.

En una ocasión, yo estaba practicando una de estas intervenciones. Era un embarazo de unas veinte semanas. Cuando separaba las membranas para llevar a cabo el cerclaje, la niña tuvo la fuerza suficiente como para proporcionarme una patadita en la mano. Fue como un escalofrío que viajó desde mis dedos hasta la columna. ¡Nunca olvidaré la chispa de vida que tiene un feto de veinte semanas! (Testimonio tomado de Diario Nuestro Tiempo – Pamplona).

Aborto, un acto de violencia

Estimado lector, el aborto provocado es un acto de violencia sobre un ser humano indefenso, y tiene consecuencias sobre la mujer. La víctima de una violación necesita de atención médica, psicológica, social y económica, necesita sentirse apoyada para no recurrir por desesperación a un aborto, porque no es una opción y traerá complicaciones para su vida. Ninguna investigación científica ha encontrado, hasta la actualidad, que el aborto inducido se asocie a una mejor evolución de la salud mental de la mujer.

¡La vida humana sí importa, y es responsabilidad mía y tuya defenderla!

 

 

Escrito por: Katherine Zambrano Yaguana. Esposa y madre, docente, Ph.D. en Educación. Líder de CANAVOX ECUADOR.

 

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